Las cosechas a partir de semillas de marihuana originales y de la máxima calidad, en condiciones de cultivo adecuadas e individualmente consideradas, siempre serán mayores en exterior que en interior, debido al mayor tamaño que alcanzan las plantas. En un cultivo de interior, aunque consigamos tener plantas de buen tamaño, sólo maduran bien los cogollos de la parte (normalmente la superior) que recibe la luz que es fija y no se mueve como el sol. Sin embargo, la ventaja del cultivo en interior es que se pueden obtener hasta cuatro cosechas consecutivas al año en vez de una, con lo que la producción puede llegar a ser superior considerando un periodo anual. Debe ser tenido en cuenta que el riesgo de cultivar en exterior es superior por las plagas y condiciones meteorológicas adversas que pueden producirse (viento, temperaturas extremas, etc.)