
En el post de hoy os hablaremos de cuantos trasplantes debemos hacer para que nuestras plantas se desarrollen sanas y fuertes en nuestro cultivo de exterior.
Es importante tener en cuenta el tipo de semilla que hayamos decidido plantar, es decir, si es autofloreciente o de temporada, ya que son dos tipos de cultivo totalmente diferente.
Si hemos decidido plantar semillas autoflorecientes, no necesitaremos hacer ningún transplante ya que su periodo de crecimiento es tan sólo de días.
En función de la variedad de auto que elijamos, una vez hemos germinado la semilla, la plantaremos en una maceta de entre 7 y 11 litros de capacidad y que sea profunda. No la transplantaremos a otro contenedor más grande ya que con el corto periodo de vida que tienen es suficiente para su perfecto desarrollo.
Hago hincapié en que la maceta sea profunda ya que las autoflorecientes dejan de crecer cuando la raíz toca el suelo y si se emplean macetas tipo jardineras nos podemos pasar tres meses regando un cogollo…
En cuanto a las plantas de temporada, sí estamos obligados a hacer varios trasplantes si queremos un buen cultivo de calidad y alta producción.
El objetivo de los trasplantes es que las raíces se vayan desarrollando poco a poco sin estresarse, con lo cual empezaremos plantando la semilla una vez germinada en una pequeña maceta del tamaño de un yogur. También podemos utilizar los prácticos jiffys que se suelen regalar en los grows al comprar tus semillas.
Una vez la planta ha alcanzado una altura de unos 5 cm aproximadamente (lo que se traduce como máximo una semana en el jiffy) la trasplantaremos a su primera maceta de unos 3 ó 4 litros donde observaremos que empezará a crecer sana y verde.
En esa maceta estará cosa de un mes aunque no hay un periodo exacto para el siguiente transplante. Cada día veremos como nuestra planta va creciendo hasta que un dia parace que se estanca y no crece más: Ese es el momento de trasplantarla a la siguiente maceta. Si apuramos mucho más nos podrían salir unas manchitas en la hoja semejantes a la falta de nutrientes, pero son debidas a que la planta necesita más espacio.
Cuando vemos que nuestra planta ya no crece más en nuestra maceta de 3 litros la pasaremos a una de entre 7 y 11.
Al igual que antes la propia planta nos dirá que quiere más espacio cuando lo necesite estancando el crecimiento.
En este punto, que ya llevamos dos trasplantes estaremos pensando en el último y definitivo…..Dependiendo de nuestras condiciones de espacio y discrección la pasaremos a un contendor de 30 -50 litros mínimo o a la tierra directamente. La planta nos crecerá mas cuanto mayor sea la maceta definitiva que usemos.
Un consejo importante es hacer todos los trasplantes a última hora de la tarde para que a las raices no las dé la luz y así no sufran ningún trastorno.
Además las raíces sufren una fuerte deshidratación en los trasplantes y les viene muy bien que tras su ejecución haya varias horas de noche en las que no hace tanto calor.
Otro consejo muy útil es que realicemos el traslado cuando está la tierra totalmente seca, ya que así saldrá toda la mata de golpe y no se nos desmenuzará la tierra.
Es importante recordaros que no debemos trasplantar a nuestra amiga una vez empieza a florecer, por lo que todos los trasplantes deben hacerse en su etapa vegetativa y el último siempre justo antes de que empiecen a hacerse mas cortas las horas de luz, lo que le dará un perfecto empujón a la planta para darnos los resultados deseados.
Buen cultivo!